¿Qué es el entendimiento mutuo?
Cada acto comunicativo o interacción es único, con requisitos y limitaciones únicos. Estos requisitos y restricciones influyen en la eficacia de la interacción en el momento. La combinación de estos factores junto con la discusión en curso determina si la interacción produce un entendimiento mutuo (Figura).
Todo acto de comunicación requiere que todos los comunicadores se involucren activamente, que se conecten y comprendan entre sí, y que comprendan los factores que inciden en este acto.
La comunicación efectiva requiere que las partes tengan un conocimiento básico entre sí y posean una comprensión mínima de sus objetivos, intenciones y expectativas individuales al participar en dicho proceso.
La palabra comunicación proviene de la unión de dos conceptos que significan común ubicación. Y es que la comunicación es ineficaz, sin entendimiento mutuo. Así, el envío y la recepción de un mensaje no logra nada a menos que haya un significado compartido y un intercambio de información útil para los participantes.
El propósito específico de la comunicación en el ámbito de la salud es compartir información y satisfacer las necesidades de las personas, incluyendo pacientes, familiares, compañero del equipo de trabajo, superiores y otros.
La comunicación efectiva en este campo ocurre cuando el emisor y el receptor se conectan entre sí con el propósito común de intercambiar información y lograr un entendimiento mutuo para un objetivo determinado: coordinar una actividad, ejecutar una tarea, educar a un paciente, llevar a cabo una evaluación de desempeño o comunicar una mala noticia, entre otros.
Es básico que los trabajadores de la salud negocien o continúen la discusión durante sus interacciones hasta lograr un entendimiento mutuo, asegurando intervenciones adecuadas y resultados significativos o lo que hemos denominado anteriormente, una comunicación efectiva.
No obstante lo anterior, hay diferentes factores que influyen en la transmisión eficaz de un mensaje, incluyendo la intencionalidad del emisor, la forma de expresión, las palabras y los recursos utilizados, la carga emocional, el momento y el contexto en que se produce el acto comunicativo y la comprensión y la interpretación del receptor, entre otros.
¿Recuerdas que hay al menos nueve posibilidades de error cuando nos comunicamos? Si le sumamos los factores que acabamos de mencionar, las posibilidades de fallar en la comunicación pueden llegar a ser infinitas.
Una comunicación eficaz requiere de la participación de dos o más personas con un tema de interés mutuo y el deseo, la intención o la necesidad de comunicar sobre el tema, así como la oportunidad, el contexto y los medios necesarios para establecer dicha comunicación.