La medición de la presión arterial en consulta sigue siendo el soporte para la valoración del grueso de los pacientes con hipertensión, por lo que se ha buscado mejorar su precisión, planteándose estrategias tales como el uso de dispositivos automáticos, con múltiples lecturas, sin la presencia del personal sanitario en la sala de medición, entre otras, lo que disminuye el estrés y el efecto “bata blanca”, mejorando los resultados respecto a los métodos ambulatorios

En ese contexto, la sección Noticias y Perspectivas del Coral Medscape, hace la reseña de un estudio publicado a finales del 2019 en la revista Medicina de Familia, en el que se encontró que la cifra 137/84 mm Hg, fue el punto de la curva ROC aplicado a la presión arterial en consulta, que presentó mayor sensibilidad y especificidad para el seguimiento adecuado de los pacientes con hipertensión arterial.

Sin embargo, el estudio, señala que este hallazgo no es suficiente para que sea utilizada como método único de diagnóstico, por lo que los valores limítrofes deben ser confirmados mediante monitorización ambulatoria de la presión arterial.

Tras la prevención y el diagnóstico precoz, el buen control de la hipertensión arterial en los pacientes es un objetivo primordial en las consultas de atención primaria, por lo que es necesario que las mediciones, tanto en consulta como de forma ambulatoria, sean lo más confiables posible.

Referencia

Cotelo J. Propuesta de un nuevo punto de corte para el control del hipertenso en consulta. Noticias y Perspectivas. MEDSCAPE. 2020.